DE BARRIO EN BARRIO 2: COMO LAS COLAS DE ANTAÑO (FLAVI)

Fuente: Blog Oui Monsieur

¿Cuántas veces has estado a punto de explotar de impaciencia mientras estabas en una cola? Seguramente, más de dos y de tres. Precisamente de eso reflexiona la FLAVI en este nuevo artículo de su boletín "De barrio en barrio", de la incapacidad de las empresas e instituciones para organizarse mejor y evitar las colas, pero también de la pasividad de los ciudadanos ante este hecho, pues todos nos quejamos pero ninguno actuamos. Al fin y al cabo, no deja de ser curioso que con las tecnologías con las que contamos, la reducción de las interminables colas no sea un hecho más palpable, aunque con la que esta cayendo, con más paro y menos empleados atendiendo tras el mostrador, no es raro ver la típica estampa de las colas de gente esperando con estoico espíritu frente a bancos y ayuntamientos. Y no esperemos un cambio a corto plazo, porque encima una de las principales entidades financieras de Andalucía, Cajasol-Banca Cívica, recorta plantilla. 

Con este panorama, entre protestas y colas, vamos a pasar más tiempo en la calle que un perro abandonado. Menuda inversión de nuestro tiempo...

Fdo: Alfonso Torres, Editor.

Cuando creíamos que “las colas” eran ya cosa de tiempos pasados; cuando creíamos que para los ciudadanos había solo una vara de medir y se había desterrado aquello de “ ¡Pero sr. Menganito!... ¿qué hace Ud. en cola? ¡pase Ud. a mi despacho…!”

Señores ciudadanos y ciudadanas: dense una vuelta por la ciudad y lo comprobarán: colas en los Bancos y Cajas, a veces para reclamar cobros irregulares y abusivos; cuando no, para suplicar que nos aplacen la hipoteca para evitar el desahucio o protestar por el “atraco” que supone la comisión de descubierto…

Colas diarias y eternas en las oficinas de empleo. Colas en las empresas para echar un curriculum, que, apenas te das la vuelta, aparece en el cesto de los papeles. Y en el Hospital, colas y largas listas de espera, aguardando a ser atendidos. Colas en la Oficina de recaudación, en donde haces cola para que te den un número para hacer otra cola y en donde voluntarios de Protección Civil han sustituido a los antiguos “grises” o a quienes debieran estar hoy como Vigilantes de seguridad ciudadana.

Consideren el valor del tiempo de los demás y organicen de una forma eficaz y rápida la atención a los ciudadanos. ¡¡Ya estamos hartos de colas!!

¿Y qué hacemos ante esto los ciudadanos de a píe?, ¿cómo reaccionamos?. ¿utilizamos las hojas de reclamaciones, los escritos de protesta?, ¿nos agrupamos en colectivos vecinales y ciudadanos para que nuestros derechos no se vean constantemente conculcados?