LSYMI VISITA EL ZOO DE CASTELLAR (Esperanza Mata)

El pintoresco grupo justo a la entrada del zoo.

El pasado sábado 10 Lo Sé Y Me Importa hizo una vista al zoo de Castellar con la participación del Alumnado Ayudante del IES Mar de Poniente.
La principal motivación de esta actividad era iniciar el plan de integración social creado por el Departamento de Orientación y convivencia del Mar de Poniente. El plan consiste en ayudar a los alumnos del aula específica a una mayor integración en la sociedad realizando actividades de ocio con chicos y chicas de edades comprendidas entre las suyas aproximadamente.

¡El día fue estupendo! Llegamos por la mañana bien temprano todos juntos al zoo. El precio de entrada fue realmente asequible, cuatro euros para los menores de 16 euros y ocho para los mayores de 16. Tanto la recepcionista Noelia como el guía Carlos nos atendieron a las mil maravillas, con toda su simpatía. Pronto iniciamos la excursión acompañados por Carlos que nos mostró con todo lujo de detalles todas las instalaciones explicándonos cientos de curiosidades sobre los animales, así como las sucesivas reformas que el centro está desarrollando.
Y es que el zoo de Castellar es una iniciativa privada con reducidísimas subvenciones concedidas que va progresando sin prisa pero sin pausa gracias a la perseverancia de sus miembros y a la ayuda de los visitantes y los padrinos. Estos últimos son personas u organizaciones que apadrinan alguna especie y que destinan fondos para sus cuidados.

Sam, el erizo albino, el rey del zoo de Castellar.

La importancia del zoo de Castellar está en que no es solo un proyecto de ocio sino también un centro de recuperación animal cuyas especies proceden en un 80% de dicha rehabilitación. No podemos imaginar la cantidad de seres que son víctimas del tráfico ilegal y en el Campo de Gibraltar entre la frontera con la colonia y el puerto de Algeciras tenemos grandes aduanas por las que transitan cientos de personas con el objetivo de hacer negocio a costa de los animales. Cuando son rescatados, muchos vienen a parar a este oasis de tranquilidad.
Continuando con la visita, estuvimos aproximadamente tres horas observando múltiples aves, monos de todos los colores, mansos tigres y enormes tortugas. Entramos en el aviario para alimentar a conejos, loros, ibis, patos y enormes gallos y para nuestra sorpresa nos encontramos allí al trío de pavos reales que deambulada por los alrededores del Ayuntamiento linense. Ya en grupos reducidos, también tuvimos la oportunidad de acariciar a los lemures no sin antes sobornarlos con alguna delicatessen, que a la postre eran granos de pienso. Tras esto, almorzamos todos juntos y echamos el resto de la tarde jugando y sacando al niño interior que todos tenemos dentro.

Todos juntos en uno de los rincones del zoo.

A continuación finalizamos esta crónica de esta agradable jornada animándoos a que hagáis una visita al zoo de Castellar, cercano en el trato y en la distancia geográfica y recopilándoos las curiosidades recogidas por el compañero Alfonso acerca de los distintos animales del zoo de Castellar:

• Las llamas pesan entorno a los 400 kilos y al contrario de lo que se piensa, tienen una gran utilidad para los humanos pues producen más lana que las ovejas, denso pelaje que les sirve de defensa. Además solo escupen cuando se sienten molestas.
• Las púas de los erizos, en contra de alguna creencia popular, no son ni venenosas ni pueden ser lanzadas, son simplemente pelos pero mucho más gruesos que los humanos. 
• El ñandu es a veces confundida con la avestruz pero el primero es sudamericano y la segunda africana. Pudimos alimentarlo sin problemas puesto que no tiene apenas fuerzas en su pico.
• El ocelote es un felino de pequeño tamaño pero a pesar de ello feroz y cazador. Son animales de ritmo nocturno y para descansar prefieren las alturas de los árboles. La evolución lo ha convertido en un felino pequeño para adaptarse a los entornos que frecuenta, altamente boscosos.
• De origen africano, el mono azul fue considerado un amuleto divino por los antiguos reyes de África, que lo mandaban atrapar y agasajar con todos los lujos propios de los mismos reyes para así hacer de su reinado un periodo próspero y extenso. 
• El papión es también un primate africano pero que frecuenta más las llanuras que los bosques, formando enormes manadas que alcanzan los 250 o 500 individuos, son por tanto animales muy gregarios. Tienen una estructura radicalmente patriarcal, hasta el punto de que los machos comen primero y solo cuando terminan dejan alimentarse a hembra y crías.